De la infancia de Aquiles

Por Evaith Horizont

Hace poco buscando otra cosa, me encontré en mi archivo muerto, algunos dibujos de lo que sería un comic informativo sobre transgénero. El proyecto no prosperó y se quedó archivado. Pero me dio gusto ver mis dibujitos y les compartiré un par de ellos. 

La primera vez que supe del dato fue en un viejo libro que había en casa, en mi infancia; el libro tenía cuentos y mitología y aun antes de aprender a leer me gustaba hojearlo. Encontrar el dibujo de una mujer sosteniendo boca abajo un bebé por un talón sobre lo que parecía un caldero humeante era ¡raro! Y estimulante a la imaginación, ¿Qué le iba a hacer al bebé?...

Ella no parecía una bruja, ¿se lo iba a comer? o ¿era una forma muy rara de bañar a un bebé? Cuando ya supe leer, me enteré que la mujer era la Diosa Tetis y el bebé, su hijo Aquiles, a quien sumergió en ese baño mágico para volverlo invulnerable, claro, como lo sostenía por el talón, fue la única parte de su cuerpo que no recibió el baño mágico.

 

Todo esto era muy interesante, pero el párrafo me resultó más interesante aún. No tengo el libro en cuestión a mano, pero casi diría que lo recuerdo de memoria. “Los oráculos estaban de acuerdo en que Aquiles tendría una vida gloriosa, pero breve.

 

Su madre, horrorizada por esto, quiso alejarlo de la guerra y lo envío a la corte de un rey amigo donde fue criado como mujer dedicado a tejer e hilar junto con las hijas del Rey, quien puso amenaza de muerte a cualquiera que se atreviera a mostrar una espada o un arma al joven Aquiles.

 

Cuando estalló la guerra de Troya, los oráculos predijeron que sólo si Aquiles les acompañaba los griegos ganarían la guerra. ¿Pero dónde estaba Aquiles? Ulises sospechó que se encontraría disfrazado de mujer, por lo que se disfrazó de comerciante y fue recorriendo las cortes. Cuando llegó al castillo del Rey, de inmediato fue rodeado por las princesas que buscaron en la caja del mercader, cintas, telas y prendedores.

 

En el fondo del caja, había una espada, que al ser descubierta por Ulises de inmediato la tomó y lanzó un formidable grito de batalla” y por supuesto terminó en la guerra de Troya y su fin, ya lo conocemos. Eso de que le llamara la atención una espada, cuando en teoría no sabía nada al respecto siempre me pareció un poco raro.

Continuará 

Publicado originalmente el 30 de marzo del 2012