Pero querías ir osadamente, dónde nadie ha ido jamás…
Por Evaith Horizont
En parte, soy una soñadora… Creo que entonces, no es raro
que en algún momento hubiera acabado tan decepcionada de la humanidad.
Mis formaciones, o deformaciones profesionales, me dieron un
espíritu crítico. Suspiro, que a veces no me ayuda mucho. Creo que me volví
pesimista por formación y definición; y como suelo decir, optimista en la
esperanza. Por supuesto, soy ambivalente en mi labor como filósofa aficionada.
Decir que Star Trek, me salvo la vida, sería una
exageración; pero al menos, si puedo decir que ayudo a sacarme de una depresión
profunda, y me devolvió, esperanza en la humanidad. Total, todo es cuestión de
esperar un par de siglos más de evolución, unas guerras eugenésicas y una
tercera guerra mundial, ¡pero hay esperanzas para la humanidad! ¡Tenemos
esperanza como especie!
Hay quien dice, que lo importante no es el destino, sino el
viaje… Ni modo, me tocó vivir en la era prewarp. No podré viajar a las
estrellas en las fantásticas naves de la Federación de Planetas Unidos, pero de
viajar, ¡ah cada viajecito que me ha tocado! De eso les puedo contar. Y de lo
que he aprendido por el camino…. Pero eso será en otra ocasión. Y para cerrar
esta nota, que acompaña a este dibujo que les dejo (me apliqué con mi lapicito
y mi caja de colores) diré. “Si vas a ir dónde nadie ha ido jamás… Lleva tortas
para el camino”.
Publicada
originalmente 29 de enero del 2015
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